viernes, 26 de abril de 2013

Vida extraterrestre inteligente


Al hablar de extraterrestres, en seguida nos vienen a la cabeza imágenes de naves espaciales llegando a la Tierra con intenciones hostiles. Quizás se trata todavía de los efectos secundarios causados por la emisión radiofónica de La guerra de los mundos de Orson Welles. Esta imagen suele ignorar las distancias reales en el espacio y hasta qué punto es insignificante nuestro planeta. Pero aunque no sea a través de una visita, hostil o de cortesía, la pregunta también es inevitable. ¿Existen seres inteligentes en algún otro planeta?

Porque ciertamente el hecho de encontrar aunque fuera una única célula de un vegetal extraterrestre representaría toda una revolución. Pero si lo miramos desde un punto de vista social, ¿qué gracia tendría? Si los extraterrestres fueran una cosa parecida a un seta, ¿qué gracia tendría? El gran impacto sería dar con otra cultura, una forma de vida inteligente distinta a la nuestra. Entonces sí, las implicaciones serían inmensas. Podríamos tratar de comunicarnos con ellos o, al menos, detectar sus comunicaciones. Lo más seguro es que no entendiéramos demasiadas cosas, pero al menos sabríamos que están allí. Y esto sería ya muchísimo.

Y para lograr esto se están utilizando todo tipo de estrategias. La más obvia es la de escuchar el Universo con la esperanza de detectar emisiones provenientes del espacio lejano que no puedan ser atribuidas a causas naturales. No es necesario que sean señales enviadas expresamente a nosotros. Hay que pensar que la Tierra está emitiendo muchas señales al espacio, ya que parte de las emisiones de radio y televisión no va de vuelta hacia nuestros receptores, sino que se pierden por el espacio y se alejan de aquí en todas direcciones a la velocidad de la luz.

Ya contamos con programas destinados a escuchar el ruido que hace el Universo. Lo que pasa es que no sabemos ni dónde, ni qué buscar. De manera que se siguen distintas estrategias. Algunos científicos buscan señales provenientes de estrellas que creemos que tienen mayor probabilidad de tener planetas parecidos al nuestro. Otros siguen la estrategia de barrer todo el cielo y analizar metódicamente las señales recibidas a distintas longitudes de onda.

De momento todavía no se ha encontrada nada, salvo alguna falsa alarma. Esto tampoco es sorprendente. Nuestra especie tiene unos cinco millones de años de antigüedad, y hace solo unas pocas décadas que conocemos las emisiones de radio. ¿Qué tecnología deben de utilizar hipotéticas civilizaciones extraterrestres? Es muy posible que para ellos la radio sea una reliquia abandonada desde hace muchos milenios. Esto, sin embargo, no detendrá la búsqueda. Lo que debemos hacer es utilizar siempre la última tecnología conocida. Y cruzar los dedos.


Vanesa y Rocío

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